esta semana Monstruo de Agua ha sido reconocida como una de las 140 empresas de impacto social en México por Citibanamex (@fomentosocialcitibanamex)!

nos enorgullece ser parte de esta lista seleccionada por @impacthubcdmx y @fomentosocialcitibanamex que destaca a las empresas con impacto positivo en nuestro país. sigue e inspírate con todas las empresas reconocidas, juntas estamos construyendo un mejor futuro. 

en Monstruo de Agua hacemos chelas ricas que cambian el mundo. creemos que es posible transformar una de las industrias más destructivas, la cervecera, en un modelo regenerativo que devuelve a la tierra más de lo que toma. a través de prácticas de buen campo, la trazabilidad, el consumo consciente y por sobre todo el diálogo y la valorización del oficio campesino, seguimos comprometidos con nuestro entorno y las personas que lo habitan.

este reconocimiento no solo celebra nuestro esfuerzo, sino que nos motiva a seguir demostrando que otro tipo de industria es posible: una que cuide de la gente y del planeta, y que inspire a otros a seguir este camino.

¡gracias a todxs que nos acompañan y apoyan en este viaje hacia un mundo más justo y sostenible! 

#SoloJuntosLlegaremos

para entender nuestros esfuerzos, es importante entender el contexto de la industria de la que formamos parte, la cerveza mexicana. 

la “cerveza mexicana” la “cerveza nacional” es un producto profundamente arraigado en nuestra cultura. tanto inclusive, que su producción masificada ha formado parte del paisaje de enormes regiones del país. un desierto verde en verano, durante el temporal, y un terreno baldío desertificado entre temporadas. así son las regiones cebaderas, entre las cuáles una de las más grandes está en la Cuenca del Valle de México. la cultura cervecera en México, se ha construido durante siglos en la presencia de dos mega grupos cerveceros… 

hace unos 20 años comenzaron a entrar en escena las cervecerías artesanales pioneras. cuando empezamos la conceptualización de Monstruo de Agua, había alrededor de 50 marcas presentes en el mercado. el número de cervecerías artesanales en México ha crecido exponencialmente y hoy día tenemos alrededor de 4,000 dando empleo a más de 20,000 personas directamente para producir casi 500,000 hectolitros de cerveza en un año, que son aproximadamente 130 millones de botellas– casi una por habitante del país. hoy día la cerveza artesanal mexicana, compuesta por estos miles de miembros regados a lo largo y ancho del país,  representan al menos el 25% del empleo directo en la industria cervecera, aunque tan sólo tenga el beneficio del 1.5% de la participación del mercado de cerveza en méxico.

la cerveza mexicana ha ganado un lugar destacado en la escena mundial por su diversidad y calidad. es la cerveza más exportada en el mundo. México ocupa sexto lugar mundial en volúmen de producción de cerveza. sin embargo, este crecimiento no ha significado un beneficio directo para los agricultores mexicanos ni para la sostenibilidad del medio ambiente. de hecho ha sido todo lo contrario por el menos 70 años. esta es una realidad que consideramos la cerveza artesanal tiene que venir a cambiar.

Alrededor del 40% de la malta usada para producir cerveza industrial es importada. Las cervezas artesanales mexicanas importan alrededor del 85% de su malta. ambas importan prácticamente todo su lúpulo. las Leyes de Pureza Alemanas que establecen que “la cerveza debe ser hecha sólo con agua, cebada, lúpulo y levadura” y han sido ampliamente seguidas por los cerveceros mexicanos. la rica diversidad biocultural de México ha sido relegada a las etiquetas pero no a los ingredientes. se ha optado por una cultura cervecera abastecida por el monocultivo intensivo de semillas de cebada patentadas, modificadas genéticamente para tolerar uso abundante de agroquímicos y fertilizantelas.

los modelos industriales como este son la norma en la industria de alimentos y bebidas. las implicaciones de su uso han sido enormes: el abandono del campo y, con ello, la extinción del oficio campesino y la soberanía alimentaria. 

en este contexto, un grupo de amigos fundamos Cervecería Monstruo de Agua, con el objetivo de participar de una auténtica identidad cerveza nacional. mientras todos estaban empeñados en la Pureza Alemana, nosotros exploraríamos la diversidad de nuestro terruño a través de la “Impureza Mexicana”. nuestra misión es clara: 

“valorizar el oficio campesino.

produciendo cervezas que reflejen la diversidad biocultural mexicana,

procurando con trazabilidad ingredientes locales y sostenibles.”

la problemática del campo mexicano

el campo mexicano enfrenta un abandono masivo, llevando consigo la extinción de la diversidad biológica y cultural del país. México, uno de los 12 países megadiversos del mundo, alberga alrededor del 10% de la biodiversidad total del planeta y más del 50% de las especies de plantas conocidas. además, con más de 60 pueblos originarios, México es un centro de diversificación biocultural. esta riqueza biocultural es la base de la gastronomía mexicana, reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2010. sin embargo, este tesoro está en riesgo debido al modelo de sistema alimentario basado en monocultivos y agroquímicos tóxicos que degradan el territorio y erosionan el suelo.

la historia del cultivo de la cebada y la producción de cerveza en México ejemplifica esta problemática. con una producción anual de casi un millón de toneladas de cebada sobre 350 mil hectáreas, los campesinos enfrentan costos elevados y ganancias mínimas. la dependencia de semillas certificadas, pesticidas y fertilizantes, junto con los bajos precios de venta, hacen que la producción no sea rentable sin el subsidio de remesas enviadas por familiares en el extranjero o en las grandes ciudades– los hijos, sobrinos y nietos que han “abandonado el campo”. se ha creado un vínculo entre agricultura y precariedad que ahuyenta a las nuevas generaciones de continuar con la tradición agrícola, poniendo en peligro nuestra diversidad y el conocimiento ancestral esenciales para nuestra soberanía alimentaria.

trazabilidad para valorizar el oficio campesino

queríamos apoyar a los productores nacionales en todos los sentidos. inicialmente, entendíamos que eso quería decir obtener nuestra materia prima en mercados y centrales de abastos, experimentando con ingredientes como mamey, mango, miel de abeja, jamaica, jengibre, tuna, miel de caña y miel de maguey. sin embargo, nos dimos cuenta de que, al comprar a grandes intermediarios, no estábamos beneficiando directamente a los productores de nuestros ingredientes. 

la trazabilidad no es sólo una herramienta técnica para rastrear el origen de los productos.

la trazabilidad está estrechamente vinculada con la soberanía alimentaria, el respeto al trabajo campesino y la sostenibilidad de los ecosistemas. 

es fundamental para revalorizar el campo y romper el vínculo entre la agricultura y la precariedad, promoviendo una economía justa.

“se trata seguir el rastro de cada ingrediente desde su origen, identificando:

– quién, cómo y dónde se cultivó

– qué prácticas agrícolas se utilizaron

– bajo qué condiciones se desarrollaron

– empatizar con esta historia

-procurar precios justos y 

-plantear caminos colaborativos de mejora socioambiental.”

así pues, empezamos a procurar directamente a los productores, no regatear y en cualquier caso procurar precios justos,  conocer las caras y las historias detrás de los ingredientes que estamos usando. y plantear un camino colaborativo para siempre procurar las prácticas de buen campo. buscamos relaciones cercanas con los productores y sus familias, creando vínculos que van más allá de la transacción comercial. buscando fortalecer el orgullo del oficio campesino y revalorizar su trabajo desde dentro del sector. buscamos dar visibilidad a la voz del oficio y la forma de vida campesina.

hoy en día, el 90% de nuestros ingredientes son de origen mexicano, y desde hace tres años, usamos únicamente ingredientes bien pagados y con trazabilidad. nos hemos convertido en productores de algunos de nuestros ingredientes. este enfoque no sólo valoriza el oficio campesino, sino que también reduce significativamente nuestra huella de carbono al sustituir ingredientes importados por locales.

“a lo largo de nuestros 12 años de exploración, hemos desarrollado más de 150 cervezas artesanales y otros fermentos como sidras, hidromieles y “vinos” de frutas, que juntas representan más de 100 ingredientes mexicanos con trazabilidad.”  

Jardín del Axolote: un modelo de microindustria regenerativa agroforestal

nuestra micro-planta cervecera y laboratorio de propagación de levaduras se encuentran en El Jardín del Axolote, dentro del Corredor Biológico Chichinautzin en Tlalpan, dentro de la Cuenca del Valle de México. esta ubicación presenta desafíos, como la falta de agua potable por tubería y de sistema de drenajes, pero estos obstáculos nos han llevado a desarrollar un modelo de cervecería agroecológica.

optamos por una delicada adaptación de una antigua casa en lugar de destruir y reconstruir, ahorrando recursos y respetando la estructura existente. nuestro equipo de cocción y fermentación está compuesto por tanques de acero inoxidable desechados que rehabilitamos, lo que ahorra la extracción de nuevos recursos.

hemos logrado optimizar la eficiencia energética y la conservación del agua adaptándonos a nuestro entorno. haciendo cervezas con levadura lager, que fermentan a temperaturas más bajas como las que enfrentados en nuestra locación a 3,000 msnm. aprovechamos el agua fría de nuestras cisternas para el proceso de enfriado del mosto, y reutilizamos el agua caliente resultante para precalentar lotes posteriores, reduciendo el consumo de gas.

instalamos un sistema de captación de agua de lluvia, canalizando los techos hacia cisternas con una capacidad conjunta de 80,000 litros. esta agua es purificada y utilizada en todo nuestro proceso. entre julio y febrero, operamos casi exclusivamente con agua de lluvia purificada. en los meses de sequía, procuramos producir fermentos de menor requerimiento de agua como el hidromiel.

sólo usamos químicos biodegradables en aguas y suelos y compostamos todos los residuos orgánicos (como el bagazo), regenerando la tierra del Jardín. hemos creado un bosque comestible, un sistema agroforestal con más de 100 especies endémicas, aprovechando las sinergias entre plantas para eliminar la necesidad de uso de fertilizantes y agroquímicos.

creemos profundamente en la importancia de compartir el conocimiento. recibimos grupos en el Jardín del Axolote ¡algunos llegan en bici desde nuestra agrotaberna! para mostrar nuestros procesos y dar a conocer la situación del campo y la importancia de la trazabilidad. damos talleres de fermentos y técnicas de cultivo regenerativo con expertos. estos talleres son promovidos primeramente con la red de productores con la que trabajamos, y también con nuestros clientes y seguidores; son espacios de gran intercambio cultural además de aprendizaje técnico para la sostenibilidad. 

más allá del jardín del axolote

nuestra cadena de producción sigue un modelo descentralizado, con la planta de desarrollo (Jardín del Axolote) en Tlalpan y producción a escala en una microcervecería en Taxqueña, Coyoacán. distribuimos nuestros productos de manera eficiente, utilizando bicicletas para entregas locales y transporte terrestre consolidado para minimizar emisiones.

el 50% de nuestras ventas se realizan en envases de vidrio ámbar reciclables. el 50% restante de nuestras ventas se realiza en barriles de acero inoxidable retornables–la mayoría desde nuestra Agrotaberna– los cuales lavamos con un proceso diseñado para minimizar el uso de agua.

en 2019, recibimos el premio a la Innovación Cervecera de ACERMEX por “nuestras cervezas híbridas y el uso de insumos endémicos y orgánicos, transformados mediante procesos responsables con el medio ambiente y socialmente justos.”

en 2020 recibimos Goula Awards a
 mejor marca o producto sustentable. un reconocimiento otorgado a las empresas que se conducen con buenas prácticas de negocio en la industria de alimentos y bebidas en México.

por todos estos esfuerzos hemos sido reconocidos. ¿pero esfuerzos realmente hacia qué?

el futuro de la cerveza artesanal mexicana

defender la cerveza artesanal mexicana debe significar apostar por un modelo de producción que aporte a la biodiversidad y la cultura del país. en Monstruo de Agua, estamos comprometidos con esta visión. creemos que al valorizar el oficio campesino, no sólo estamos preservando la biodiversidad y el conocimiento ancestral, sino también construyendo una economía sostenible, resiliente y más justa. que estamos contribuyendo directamente a sanar la fuente de los principales retos ambientales y sociales de nuestra sociedad. 

es importante recalcar que no se trata de romantizar ni infantilizar al campo. cuando hablamos de valorizar al oficio campesino, es darle su fundamental lugar económico y social como la base de nuestra soberanía alimentaria y la salud de nuestros ecosistemas.

“oficio campesino” es un conjunto de habilidades, conocimientos y prácticas tradicionales que lxs campesinxs desarrollan y transmiten en el contexto rural: agricultura, ganadería, el manejo de recursos naturales, elaboración de productos derivados de la tierra. “campesino” apela a connotaciones culturales y sociales que resaltan la identidad, la conexión con la tierra, y la tradición comunitaria.

nuestro enfoque en la producción local y el uso de insumos agrícolas mexicanos es un ejemplo de cómo la industria cervecera puede contribuir a la soberanía alimentaria y al desarrollo sostenible. al consumir nuestras cervezas, los clientes no solo disfrutan de un producto de alta calidad, sino que también apoyan una causa mayor: la defensa y revalorización del oficio campesino mexicano.

toda cervecería artesanal debiera ser local y trazable desde el grano al vaso. 

la defensa de la cerveza artesanal mexicana es un acto de amor y respeto hacia nuestra tierra, nuestra cultura y nuestras comunidades. estamos orgullosos de ser parte de este movimiento. en un mundo donde la industrialización y la globalización amenazan con homogeneizar y acabar con todo, la cerveza artesanal mexicana representa una resistencia y una celebración de nuestra identidad única. 

juntxs, podemos hacer una diferencia, un sorbo a la vez.